24. Casa Poeta Antón Cerdán Milla

Antonio Cerdán Milla (1917-2005) nació y vivió la mayor parte de su vida en su querido Fuente-Álamo. A la edad de siete años, la familia se marchó temporalmente a Barcelona, ciudad en la que empezó a trabajar para poder aportar su pequeño jornal a la insuficiente economía familiar. Nunca pudo, por tanto, ir a la escuela. Fue su padre quien le enseñó sus primeras letras y como juntarlas, en lecciones improvisadas cuando volvía del campo cada dos semanas. Comenzó a leer todos los papeles que caían en sus manos, aprendió a escribir mediante muestras y pronto se aficionó a la escritura, sobre todo de poesía.

[…]Y cuando cumplí siete años

me fui a la Ciudad Condal

y allí me busqué trabajo

cobrábamos los muchachos

un durico semanal.

Con veinte años a la guerra

y luché en artillería

y en Bilbao en la posguerra

con Franco en infantería.

Y allí lo pasé muy mal

nos daban mal de comer

y muchos no lo contarán

jamás pudieron volver.[…]

Recuerdos añejos

Durante su paso por el servicio militar, su interés por la lectura y la escritura se vio reforzado pues era él quien leía y redactaba muchas de las cartas de los compañeros que no sabían, además de las suyas propias.

De vuelta en el pueblo, tras treinta meses destinado en Bilbao al acabar la guerra, formó su familia con Isabel “La Capitana”, a la que menciona en muchos de sus poemas. Tuvieron seis hijos.

Antonio -Antón, como se le conocía en el pueblo- comenzó a escribir sobre todas las vivencias que se daban en su día a día: el trabajo en el campo, anécdotas familiares, vivencias del pueblo, sus gentes…

En el año 1967 escribió su primer pregón, tras la muerte de Salvador, quien había sido el pregonero hasta la fecha. En este, año a año y durante veintisiete, relató las aventuras y desventuras de la vida en el pueblo, las cuales eran leídas en público por él mismo durante las Fiestas Patronales en honor a San Dionisio.

Cuando llegan estas fechas

siempre os escribo el pregón

para alegrarle las fiestas

a nuestro Santo Patrón.

A la reina y a sus damas,

y a su gran Corte de Honor,

a nuestras Autoridades

y a toda la Comisión

Y mandarles un abrazo

a todos nuestros ausentes

y un cariñoso saludo

para todos los presentes.[…]

Inicio del Pregón 1983

En 1993 escribió su último pregón, pero conservó la afición por la poesía que le acompañó a lo largo de toda su vida, escribiendo hasta el final de sus días desde la salita de su casa en la Calle Mayor, donde las puertas y ventanas siempre estaban abiertas para recibir a los amigos y vecinos.

Antón fue una persona muy polifacética. En sus propias palabras:

[…]Fui fotógrafo en mis tiempos,

músico de acordeón

y en el equipo del pueblo

jugué al fútbol de portero

sin ir a la selección.

Y pastor en los almendros,

en Jaraba, gorrinero

y en el Regajo, burrero

y aquí en el pueblo enfermero.[…]

Recuerdos añejos

En el año 2002 se publicó “Fuenteálamo en verso”, un libro que recoge muchas de sus poesías y pregones y del que Antón se sentía muy orgulloso. En él, se recogen en verso las costumbres de este pueblo, el día a día de sus gentes sencillas, los cambios a lo largo del tiempo; sus parajes y caminos, sus cauces y ramblas, su Fuente y su Álamo.

Fuentealamo de Albacete

jamás te podré olvidar,

si aquí aprendí, alegremente,

en la Glorieta a jugar.

Aquella Plaza bonita,

que para mí es una historia,

porque aún la llevo metida

en el alma y la memoria.

Con sus aguas cristalinas

y sus asientos de ensueño,

pasaban horas divinas

los viejos y los pequeños.

De aquella Fuente bendita,

que aún guardo buenos recuerdos,

del Álamo y de la Ermita

y del viejo Lavadero.[…]

Recuerdos del año 30

Leyendo la obra de Antón uno puede imaginarse cómo se vivía antaño y pasear por las calles y tradiciones de un Fuente-Álamo ya desconocido, y revivir la transformación del pueblo desde sus orígenes más humildes hasta nuestros días.