El refajo es la prenda tradicional de ropa de mujer similar a las faldas y pieza indispensable en la indumentaria tradicional femenina, muy extendida por todo el país desde el siglo XVIII y XIX.

En origen era una prenda interior, de abrigo, bordada y decorada con cenefas generalmente con motivos vegetales. Los refajos se distinguen según las zonas a las que pertenece, y si son de gala o de faena. En la provincia de Albacete nos podemos encontrar los refajos de pequeños pliegues de rayas de colores, a los bordados con cenefas. Y según el poder adquisitivo de las dueñas se confeccionaban en varios colores y con una, dos e incluso tres cenefas bordadas en lana, seda, etc. En Fuente-Álamo se conservan buenos ejemplos de prendas originales y reproducciones que se han ido conservando de madres a hijas hasta llegar a nuestros días, y que se pueden ver en las fotografías.

En las letras de las coplas tradicionales también se dejan ver los refajos:

“y con esta ya van cinco,

Allá va la despedida,

Y con esta ya van cinco,

Mi novia tiene un refajo,

Pero le faltan los picos

Pero le faltan los picos.”

Este monumento viste un escenario que hace función de fuente y que alegra, en las noches de verano, la Semana Cultural que se celebra la primera quincena de agosto y que culmina con el tradicional “Baile de los Gazpachos”.

Podría ser el único monumento que se conoce en toda España inspirado en esta prenda tradicional.